martes, 14 de diciembre de 2010

Polvorin del fuerte San Miguel Arcangel de Arecibo

Del National Trust for historic preservation
http://www.preservationnation.org/magazine/911/16th-century-fort-crumbles-in.html

16th-Century Fort Crumbles in Puerto Rico

Dear Preservation 911,

I am writing to express my concerns about the destruction of historical site in the city of Arecibo, Puerto Rico.

The site, which as of today is not listed in the National Register or at local level, is the Polvorin de San Miguel Arcangel (polvorin is a powderhouse) built by the Spanish at the end of the 18th and beginning of the 19th century as part of the city of Arecibo's defensive system.

The structure was part of the Fort of San Miguel Arcangel, located at the edge of the peninsula where Arecibo is located and at the entrance of the mouth of the Rio Grande de Arecibo. The construction of these two military structures (the fort and the powderhouse) was a result of battle in 1702 when a British fleet tried to invade the city and local militia in charge of Captain Antonio de Los Reyes Correa defeated it.  The colonial government decided to build these buildings as a protective measurement against any future attacks of foreign powers.

Subsequently, the old Fort deteriorated and in 1881 was demolished by local authorities. In its place they built a square, "Paseo de Damas." The powderhouse, which is owned by the municipal government, was eventually abandoned and now is a parking lot. There are still good remains of the main structure and remnants of its surrounding wall. Unfortunately it is filled with garbage and has had no maintenance.

Without action, Arecibo will lose one of the few military structures outside the Old San Juan; the others being el Fuerte del Canuelo or San Juan de la Cruz (Cataño), el Fuerte de la Concepcion (Aguadilla) y el Fortin del Conde de Marisol (Vieques).

It is my hope that this military structure is protected for future organizations. Please let me know if there is something you can do to help.

Sincerely,

Manuel Santiago

jueves, 9 de diciembre de 2010

Historias en torno a la Rogativa

Las Fiestas de Cruz, se originan en España y cuenta la tradición que se empezaron a celebrar en Puerto Rico tras la Isla haber sido sacudida por un terremoto el 3 de mayo de 1787(20 dias antes habia sido azotada por un huracan). Ese día se hallaron los restos de una cruz y los pobladores comenzaron a elevar plegarias y cantaron para que Dios los librara de aquel terrible mal. Con música se hicieron los rezos a la Santa Cruz.
 Diez años despues (1797) los britanicos sitian San
Juan; esta es la historia:
La invasión británica a Puerto Rico de 1797
Relato tomado de "Memorias geográficas, históricas, económicas y estadísticas de la isla de Puerto Rico" Tomo 3, escritas por Don Pedro Tomás de Córdoba en la década de 1830.

Al amanecer del 3 no se avistò otro buque que una fragata que permanecia como bloqueando el puerto. Se recogieron 4 dispersos de los ingleses.

De acuerdo con el Sr. Obispo se dispuso cantar en la Sta. Iglesia Catedral un solemne Te-Deum con misa y sermon que predicó el mismo Sr. Obispo, en accion de gracias al Todo Poderoso por los auxilios de ánimo que prestó en tan críticas circuntancias á todos los defensores de la plaza y á los habitantes de la Isla que volaron á su socorro. Para que á un acto tan religioso y justo asistiesen todos á manifestar general y particularmente el reconocimiento debido al Dios de los Ejércitos con el fervor que á cada cual dictase su cristiano corazon, se publicò en la ciudad dicha disposicion, y el ejército concurrió en la forma siguiente.

Toda la guarnicion franca formó en batalla á las siete de la mañana de este dia en el campo de nuestra línea, y pasando al de columnas, emprendió la marcha en este orden. Formaban á la cabeza un cabo y ocho dragones, seguidos de dos piezas de campaña con la correspondiente dotacion de artilleros: á corta distancia iba el General del ejército á caballo, en uno de los que dejó el enemigo, y se creia corresponder al general Albercombry, lo acompañaban todos los gefes de la plaza, comandante de marina, edecanes y ayudantes; seguia inmediatamente el cuerpo de franceses con su comandante D. Agustin París y sus ayudantes; una compañia del regimiento fijo con la música; el comandante del puente de San Antonio, ingeniero ordinario D. Ignacio Mascarò con los oficiales y guarnicion de aquel fuerte, tremolando el mismo pabellon que tan valerosamente habia defendido, y en el que se manifestaban los balazos que recibió en aquel puesto: el comandante del castillo de S. Gerònimo teniente coronel D. Teodomiro del Toro con los oficiales y tropa de aquella guarnicion y artilleros franceses que sirvieron en aquel puesto con su comandante Mr. Varron, capitan corsario de la república, tremolando igualmente el pabellon que con tanto denuedo habian defendido, y en el cual se notaban los balazos que le pasaron; toda la milicia urbana que entró al servicio de los pueblos de la Isla, cerrando la columna la milicia disciplinada de infantería y dos cañones de campaña en el mismo orden que los de vanguardia y por último tres compañias de caballería.

En este orden llegó la columna á la plaza de la Catedral formando á su frente en el orden de batalla, á cuyo tiempo se incorporó en ella el capitan de puerto teniente de fragata D. Juan Hurtado, con todo el cuerpo de su mando y la bandera de una de las baterías flotantes.

Se introdujeron en la Iglesia los referidos pabellones triunfantes y se colocaron en el presbiterio durante la funcion. Se hizo una salva triple en los tiempos acostumbrados, principiándola las piezas de campaña, en seguida todo el ejército, é inmediatamente toda la artillería de la plaza y flotantes. Concluido un acto tan piadoso como cristiano se retiraron las tropas á sus destinos, quedando las banderas en la Catedral para colocarlas en la cornisa como trofeos de la gloria de esta plaza en su defensa contra los ingleses.

La grata sensacion que causó la vista del ejército vencedor con los pabellones traspasados á balazos al lado de los valientes gefes que dirigieron la defensa, y la del mismo ejército que con tanto valor, constancia y bizarria la defendieron en honor y gloria de las armas españolas, conmovió tiernamente los corazones de todos, y rebosando en sus semblantes el júbilo y el gozo mas espresivos, prorrumpieron en aclamaciones, repetidos vivas y otras fieles demostraciones de contento y alegría.

web: http://www.fortunecity.com/victorian/churchmews/1216/Invasion1797.html



lunes, 29 de noviembre de 2010

Exige voluntad para salvar San Jerónimo

Exige voluntad para salvar San Jerónimo
sábado, 14 de julio de 2007
Maritza Díaz Alcaide / Primera Hora

La historia tiene las respuestas.

Don Ricardo Alegría, la persona que en los años cincuenta salvó de las ruinas al fortín San Jerónimo del Boquerón, advirtió ayer que el Gobierno de Puerto Rico tiene la obligación de proteger la histórica edificación, incluso de procurar que se eliminen las piscinas diseñadas para el complejo turístico Paseo Caribe, dispuestas frente por frente al monumento.

“La fortificación tiene que ser más importante que cualquier otra construcción”, subrayó el primer director ejecutivo del Instituto de Cultura Puertorriqueña (ICP) durante una entrevista con PRIMERA HORA.

En cuanto a las piscinas de Paseo Caribe, Alegría dijo que permitirlas sería una “vergüenza” ante el paisaje que le aportan al fortín.

Alegría no pidió la demolición total de Paseo Caribe. Pero, advirtió que el Gobierno de Puerto Rico tiene que garantizar la integridad del fortín, el acceso del público y si eso conlleva remover alguna construcción, habrá que hacerlo.

Restaurar San Jerónimo, dijo Alegría, es más fácil de lo que se ha querido proyectar. Tanto así que las obras podrían completarse en un periodo de tan sólo seis meses.

Según el respetado antropólogo y restaurador del Viejo San Juan, ni siquiera sería indispensable la ayuda del Cuerpo de Ingenieros del Ejército, si hay voluntad por parte del Gobierno de Puerto Rico de tomar las acciones correspondientes.

El monumento, aseguró, se puede salvar porque está en mejores condiciones que las que él lo encontró en 1956, cuando le fue cedido por el Municipio de San Juan y él, como director ejecutivo del ICP, dispuso allí el establecimiento de un museo militar.

La voz de la experiencia

Aunque el ICP claudicó ante el proyecto de Paseo Caribe y finalmente otorgó su endoso, Alegría afirmó ayer que el Instituto tiene poderes y que sólo se requiere que quienes lo dirigen quieran ejercerlos.

“Yo, como director ejecutivo, detuve la demolición de lo que hoy es el hotel El Convento. Lo declaré monumento histórico. En los años 50, Luisa Géigel quería demoler la casa donde se estableció el Museo de la Familia y le ganamos en el (Tribunal) Supremo”, recordó sobre aquellas múltiples batallas que dio para salvaguardar nuestro patrimonio histórico edificado, en muchas instancias -como ahora- en contra de intereses económicos.

Esos intereses, de hecho, llevarían a mediados del siglo pasado a vislumbrar, por ejemplo, el Viejo San Juan como un “pequeño Nueva York”, una quimera peligrosa.

En el orden político, un Alegría de apenas 32 años también se enfrentaba entonces a la Ley de la Mordaza, cuya imposición derrotó cuando el Departamento de Justicia le quiso ordenar el retiro de los nombramientos de Roberto Biascochea e Isabel Gutiérrez, por haber sido expulsados por razones políticas de la Universidad de Puerto Rico.

Que se revisen las escrituras

Alegría recomendó, de otro lado, que se examinen las escrituras y contratos de compraventa de la zona donde enclavan Paseo Caribe y el hotel Caribe Hilton.

Esos terrenos, con el cambio de soberanía en 1898, pasaron de la Corona Española al Gobierno de Estados Unidos.

Donde eventualmente el Gobierno de la Isla construyó el Hilton fue un espacio que en 1921 el Gobierno federal concedió en usufructo a Virgil Baker, un radiotelegrafista retirado y oficial de la Marina que había logrado desencallar de la entrada del Morro la embarcación del héroe de la Primera Guerra Mundial John J. Pershing.

En 1946, la Compañía de Fomento Industrial, bajo Teodoro Moscoso, adquiere de Baker esos terrenos para la construcción del Caribe Hilton.

Baker ya había cedido otros terrenos de la zona, frente al Tribunal Supremo, pero la transacción terminó en corte porque quienes los adquirieron se negaban a pagar contribuciones, por no considerarse propietarios.

“Por lo general, las tranferencias de terrenos con valor militar se condicionan, por si se requieren para una emergencia”, explicó Alegría, quien también sugirió que se lleve a cabo un análisis de los documentos que dieron pie al reciente traspaso por parte del Gobierno federal al estatal de los terrenos donde se construye Paseo Caribe.

“Esa escritura es importante porque puede contener restricciones sobre el uso de esos terrenos”, advirtió.

Recordó en ese mismo contexto que la venta en 1998 del Caribe Hilton, por parte de la administración de Pedro Rosselló, se hizo “por la absurda suma de $80 millones”.

El Hilton era a la sazón el único de los hoteles del Gobierno que tenía ganancias.

viernes, 5 de noviembre de 2010

Cañón Ordóñez de 15 cm modelo 1885




Con este cañón se realizó en Puerto Rico, el día 10 de mayo de 1898, el primer disparo en esta corta guerra. También se utilizó en la defensa de San Juan durante el bombardeo del 12 de mayo de 1898. El cañón Ordoñez de 15 cm junto al Plasencia de 8 cm (Combate de Asomante) son los protagonistas, en cuanto a artillería se refiere, de las principales acciones en nuestra Isla.

EL PARQUE COLON

EL PARQUE COLON

Tomado del libro Memorias de mi Pueblo
de Doña Hayde Reichard de Cancio


          El Río Culebrinas, aunque no es un río muy grande, tiene una historia llena de encantos y tradición.

          El historiador puertorriqueño Salvador Brau, en su obra Puerto Rico y su historia, página 11, último párrafo, escribe: "En cambio consta históricamente que el Cacique Aymamón tenía su ranchería a orillas del Río Culebrinas, cerca de la población de Sotomayor; y como el Río Culebrinas desemboca en la bahía de Aguadilla, y fue en las inmediaciones de la costa donde la población se edificó, necesario es admitir que esa ranchería del Cacique Aymamón fue la misma visitada por Colon y tan prolijamente descrita por las Casas y Muñoz."

          Como estos historiadores anteriormente citados hay un sin número de historiadores y amantes de nuestra historia que sitúan el desembarco colombino al margen del Río Culebrinas. También es cierto que estudios hechos recientemente por un grupo de historiadores difieren de éstos, queriendo colocar el desembarco de Colón por Añasco, Rincón, Cabo Rojo y otros pueblos.

          En 1888 el Ateneo de Puerto Rico llevó a cabo un certamen sobre el sitio del descubrimiento de Puerto Rico. Historiadores como Salvador Brau y el Dr. Coll y Toste mantuvieron que el desembarco de las naves colombinas se habita efectuado entre Punta Borinquen y Punta San Francisco. Se escogió las cercanías del Río Culebrinas como lugar para levantarse un monumento conmemorando dicha hazaña.

          En 1893 cuando se celebró el cuarto centenario del Descubrimiento de Puerto Rico seerigió al lado sur del Culebrinas una cruz de granito y mármol conmemorando dicho suceso

.          Para tener acceso al primitivo monumento (1893), yendo directamente del pueblo de Aguadilla, por la orilla del mar, había que atravesar la ''Boca Vieja'' del Culebrinas que hoy está cruzada por la carretera al Parque Colón.

          Siendo el Río Culebrinas, por su antiguo cauce (Boca Vieja o Madre Vieja) límite municipal entre Aguada y Aguadilla, el monumento primitivo quedó en la margen izquierda del Culebrinas en territorio de Aguada y Coloso.

          Las vicisitudes de ese monumento han sido muchas. Las furias del temporal San Ciriaco derribaron parte de la cruz; el Capitán Judson, encargado de Obras Públicas (del Gobierno Militar de E.U.) lo reconstruyó, pues eran pocos los daños. En 1918 los fuertes terremotos derribaron el monumento erigido en 1893. Lo que quedó fue demolido por orden del municipio de Aguada.

          En 1924 el Sr. Rafael Fabián, Director de la Central Coloso, invitó a un grupo de aguadillanos y aguadeños a las ruinas de la Cruz de Colón. En esa reunión el Sr. Fabián donó 20 cuerdas de terreno pertenecientes a Coloso, para la construcción de un parque de recreo.

          A consecuencia de dicha donación se creó un Comité Pro Parque Colón. El comité sólo pudo recaudar la cantidad de $1,000, haciéndose el proyecto casi imposible de realizar. Se necesitaban miles de dólares para acondicionar y construir un puente sobre ''Boca Vieja". No se podía por tanto cerrar esa Boca para dar paso al Parque Colón, a menos que no se cambiaran las aguas de ese acceso. Utilizando presos de penales se cortó un canal por detrás del parque, echándose así las aguas de "Boca Vieja'' al mar por la parte sur.

          A consecuencia de dicha obra el Culebrinas, a su salida, obtiene un nuevo curso. Por esa razón el monumento, sin cambiar de sitio, quedó a la derecha del nuevo curso.

          En 1937 siendo Secretario de Obras Públicas de Puerto Rico don Guillermo Esteves Volckers, la Legislatura de Puerto Rico aprobó la construcción del Parque Colón.

          Dejemos que sea el mismo don Guillermo Esteves quien explique cómo se reconstruyó el monumento caído en 1918: ''...Yo busqué en los Archivos de Obras Públicas los planos del monumento de 1893-, y allí estaban y deben estar- y exactamente en el mismo sitio se construyó el actual monumento, obra que realizó el escultor ''Janella" sin desviarse un centímetro de los planos. Felizmente la base principal del monumento había quedado sin tocar, o sea la fundación y arranque. Quiero aclarar que el monumento es de piedra artificial y granito -pues los fondos eran pocos- y había que hacer además el parque -o parte de él".

          El monumento de la Cruz de Colón no pertenece a un pueblo, ni a una nación, sino al mundo entero, demostrando que somos un pueblo civilizado y cristiano.
http://www.aguadillapr.com/parque.htm

martes, 2 de noviembre de 2010

El sombrero: El primer periódico de Vega Alta

La mañana del 8 de abril de 1877, la comunidad vegalteña amaneció sorprendida con la circulación de un periódico totalmente manuscrito que llevaba el nombre
 El Sombrero. Seguramente lo que llenó de asombro a los vegalteños, no fue la excelente habilidad caligráfica de los redactores “Goyo Flores” y “El Macuquino”, ni sus magníficas caricaturas a colores, sino los comentarios satíricos y los chistes y poemas incluidos en sus ocho páginas. La singularidad de este periódico, por la cual trasciende el ámbito local para ocupar un lugar destacado en la  historia  del periodismo puertorriqueño, radica en que era totalmente manuscrito, un ejemplar (circulaba gratuitamente de mano en mano entre los vecinos) y utilizaban el difícil arte de la caricatura para expresar crítica social e incipiente sátira política.

El periódico El Sombrero fue originalmente un semanario dominical que se publicó desde el 8 de abril hasta el 2 de noviembre de 1877. A partir de la edición número 16 (22 de julio), comienza a circular cada 15 días hasta desaparecer cuatro meses después, lo que equivale a 25 números publicados. En su primera etapa (del 8 de abril hasta el 22 de julio), el director de El Sombrero fue Modesto Achilla, quien utilizaba el seudónimo de “Goyo Flores”. Posteriormente, asumió la dirección José M. De Loria y Arnaúz, alias “El Macuquino”, quien también era redactor, dibujante y co-director. Algunos de los colaboradores del periódico fueron “El Capote”, “Cascas”, “Guarionex”, “Melitón Flores” y el “El Jíbaro”. Lamentablemente éstos nunca se identificaron por sus nombres, quedando su trabajo en el anonimato. De Loria fue alcalde de Vega Alta en el 1887. Se casó con la dama vegalteña Guadalupe Arnau y Lespión.

El nombre del El Sombrero aludía al simbolismo de esta prenda de vestir. Se suponía que el sombrero representaba: dignidad, elevados propósitos y principios morales. Esto infiere de una apología al sombrero que decía lo siguiente: “el sombrero es lo más alto elevado que puede haber; se ostenta siempre sobre la raza humana; hasta se observa sobre la cátedra del Espíritu Santo y en algunas otras de la profana discusión.

[Tomado del libro: Historia de Vega Alta de Espinosa, de Leonardo Santana Rabell]

sábado, 30 de octubre de 2010

30 octubre de 1950

El lunes 30 de octubre la insurrección comenzó en Peñuelas a las 4:45 de la madrugada y rápidamente surgieron incidentes violentos en otros siete pueblos de la Isla. En Jayuya, los nacionalistas bajo el liderato de Blanca Canales, Elio Torresola y Carlos Irizarry (quien murió en el ataque), tomaron el pueblo por un día luego de proclamar la República. Poco después del mediodía ocurre el asalto a la Fortaleza (donde murieron cinco nacionalistas) y en la tarde el tiroteo, que fue transmitido por radio, entre el barbero Vidal Santiago y numerosos policías. Esa misma tarde el gobernador Luis Muñoz Marín movilizó a la Guardia Nacional y al día siguiente sus aviones bombardearon a Jayuya y a Utuado.

  En San Juan, cuatro nacionalistas penetraron al patio de La Fortaleza, residencia oficial del gobernador.  Del intercambio con la Policía de seguridad, solo sobrevivió uno de los nacionalistas.  Durante el ataque Muñoz llamó a los oficiales de las fuerzas armadas de EEUU estacionadas en la isla para que interviniera.  Según escribe Géigel Polanco, que estuvo al lado de Muñoz en ese momento, los militares contestaron “que no podían actuar sin órdenes del Presidente, en Washington,” quedando demostrado quien era el que tenía verdadera autoridad sobre Puerto Rico.  A raíz del ataque a La Fortaleza se emitieron órdenes de arresto tanto a nacionalistas, como a independentistas miembros del PIP.  Hubo otro incidente el 30 de octubre en la barbería del nacionalista Vidal Santiago, en el Barrio Obrero de Santurce.  La acción entre Santiago y 15 policías que acudieron al lugar duró tres horas.  En la balacera, Santiago resultó gravemente herido junto a otros dos civiles y un niño

jueves, 28 de octubre de 2010

Luisa Capetillo (1879-1922)

Luisa Capetillo (1879-1922)
Nació en Arecibo, Puerto Rico un 28 de octubre de 1879.

Vivió a principios de este siglo y fue periodista, escritora, sufragista y trabajó como lectora en fábricas de tabaco en Arecibo, su pueblo natal. Afiliada a la Federación Libre de Trabajadores viajó por toda la isla organizando a los trabajadores del tabaco y la caña. Fue la primera mujer en usar pantalones. (1880) y fué encacelada por llevar traje de hombre"...desafió todas las convenciones de la época.Tambien fué una defensora del amor libre,(1882), tuvo hijos sin estar casada. En 1904 empezó a escribir ensayos.

 Luisa recibió una educación, principalmente de su madre, en el hogar más avanzada que la que recibía en instrucción formal. La enseñanza para los varones era de mejor calidad que el de la hembra en las instituciones educativas.

En 1906 empieza a trabajar como lectora en las fábricas del tabaco. Aquí es donde se profundiza su educación. Los obreros en la industria del tabaco empleaban a lectores que les leyeran durante su jornada. Estos lectores leían de las novelas de Zola, Tolstoy, Hugo, Balzac, Dumas y otros. También leían de las obras de contenido social y político de Marx, Engels, Bakunin, y otros escritores de ideales avanzados. También se leían de los periódicos y revistas de índole socialista, anarquista, y sindicalistas.

En 1907 Luisa publica su primer libro Ensayos Libertarios donde expone sus ideales políticos y sociales. Ese mismo año empieza como líder y organizadora sindical haciendo trabajo, según sus propias palabras, "como propagandista, periodista, y escritora ..." ayudando a una huelga de campesinos encabezada por la Federación Libre del Trabajo (FLT), también fue una gran luchadora por los derechos de la mujer. En 1908 en el 5º Congreso de la FLT, Capetillo lucha para que la organización apoye el derecho al voto para la mujer. En 1909 Luisa recorre el país en una gira con otros líderes de la clase trabajadora para concienciar a los trabajadores sobre los ideales de la sindicalización. Esta "Cruzada del Ideal" fue organizada por la FLT.

La Capetillo es considerada la primera sufragista de Puerto Rico. Al contrario a otras feministas que lucharon por el voto femenino, Capetillo aboga en favor del voto para todas las mujeres y no solo las educadas. Publicado por su propia casa editorial Biblioteca Roja, sale su libro Mi Opinión donde ella habla de sus ideas sobre los derechos de la mujer en 1911. Anterior había publicado una revista llamada La Mujer.

 

En el 1912 sale de su país y pasa tiempo viviendo, escribiendo y activa en las organizaciones y luchas obreras de Nueva York, Tampa y en Cuba, donde vive en La Habana y Cárdenas. En Cuba la arrestan con el propósito de deportarla por ser una anarquista extranjera peligrosa.

Al regresar a Puerto Rico participa como organizadora y dirigente de huelgas agrícolas en Patillas, Ceiba, y Vieques. En Vieques rompehuelgas la atacan y en Ceiba la arrestan por alterar la paz y le formulan cargos de incitar motines. Visita a la República Dominicana donde se le prohíbe hablar en público aunque fue invitada para ese propósito por los zapateros en huelga de la capital de ese hermano país.

Para el 1919 se muda de nuevo para la gran urbe, Nueva York, donde establece una casa de hospedaje y un restaurante en la sección de Chelsea. A su establecimiento acuden muchas personalidades hispanas activas en las luchas obreras del área. En esta ciudad vuelve a trabajar de nuevo como lectora en las fábricas de tabaco.

En 1921 se publica, en Argentina, un libro, Voces de Liberación, con escritos de las mujeres más progresistas del mundo. Además de Luisa Capetillo se incluyen obras de Emma GoldmaN, Rosa Luxemburgo, Clara Zetkin entre otras. Ese mismo año Luisa participa en las campañas electorales del Partido Socialista de Puerto Rico en el cual ha militado por muchos años a pesar de sus convicciones anarquistas.

Luisa Capetillo veía las cuestiones políticas a través de su experiencia como puertorriqueña. Pero su punto de vista era siempre internacionalista. Ella explicaba que "La tiranía, como la libertad, no tiene patria, como tampoco los explotadores ni los trabajadores". Infortunadamente, ella extendió su punto de vista internacionalista a no ver la lucha por la liberación e independencia de Puerto Rico como una que era, objetivamente, contra el capitalismo, siendo antiimperialista.

 Luisa Capetillo sufrió de tuberculosis y murió un 10 de octubre de 1922. Se puede decir que vivió una vida muy intensa y casi hasta el momento de su muerte peleó por las cuasas de los trabajadoes y por la emancipación de la mujer.

domingo, 17 de octubre de 2010

CAMUY

"Ciudad Romántica"
"La Ciudad del Sol Taíno"
 "La Ciudad de los Areneros "

El 17 de octubre de 1806 la Diputación Provincial accedió a la solicitud presentada por Juan I. Martínez y Rafael Cáceres, a nombre de los vecinos de Camuy, para constituirse en pueblo y parroquia independientes "en el territorio que media entre el río nombrado Carrizal y el de Guajataca".

Durante el siglo XVIII, la Corona española debió conceder a alguno de sus súbditos el usufructo del territorio de Camuy constituido en hato, descrito como de cuatro leguas cuadradas de extensión, lo que representa un enorme latifundio. Se sabe que en 1804 el Gobernador Ramón de Castro designó un descendiente de Antonio de Matos, Félix, Teniente de Guerra de Camuy, con el propósito de que fomentara su riqueza.

La economía de este territorio se basó originalmente en la explotación de ganado vacuno, que se criaba salvaje en los bosques casi impenetrables que cubrían éstas tierras. Más tarde se inició el comercio maderero. En un aserrío situado en la margen del río se aserraban troncos de árboles tan valiosos como acetillo, cedro, abeyuelo o quitarán, capá blanco, maga, guaraguado y otros. En aquel momento tal riqueza parecía inagotable, pero aquella explotación irrazonable acabó por destruirla. Además de madera y ganado, el hato producía café, maíz, melao, arroz y tabaco.

 
En 1868 en Camuy tuvieron lugar muchos de los hechos conocidos en la historia como el Grito de Lares. La Junta Revolucionaria Lanzador del Norte, Presidida por Manuel María González, correspondía a Camuy. El 15 de febrero de 1873 tuvo lugar el hecho conocido como "La Estrellada". Al parecer, algunos intrigantes denunciaron a la Guardia Civil que en la hacienda de un rico comerciante, el dominicano Cayetano Estrella, se preparaba un alzamiento separatista. Cuando la Guardia Civil fue a la hacienda a investigar, fue recibida a tiros. Estrella y los demás supervivientes fueron arrestados y acusados de sedición.

miércoles, 13 de octubre de 2010

El Fuerte Caprón de Guánica

El Fuerte Caprón de Guánica, está localizado en la parte más alta del monte que da frente a la bahía de Guánica por el Este, dentro de la reserva forestal del Bosque Seco. Su construcción la iniciaron los españoles. En la década del 40, en Puerto Rico, entró en vigor el Programa Federal de las C, del finado Presidente Roosevelt. El Fuerte fue reparado y se convirtió en un lugar de atracción para mucha gente. Estan importante el Fuerte que su figura aparece en la bandera de Guánica. El fuerte original fue construído de madera por los españoles mucho antes de la invasión norteamericana, era un lugar estratégico de vigilancia de la costa de posibles ataques de piratas y corsarios. El fuerte que observamos hoy en día se construyó en 1898 por el ejército de EE.UU después de la invasión de Guánica el 25 de julio de 1898. Su nombre conmemora el primer soldado norteamericano muerto en Cuba en la Guerra Hispanoamericana. Este fuerte es la figura central en la bandera de Guánica (ver foto). El fuerte está construido en piedra de coral y ladrillos y consta de una torre de observación, escaleras para subir a la torre y un muro en piedra con espacio para cañones. También se encuentra una mini plaza o un área despejada donde seguramente había una casa de madera, donde quedan apenas unos pedazos de cemento, también se pueden encontrar una base de cemento donde se izaba la bandera. Llegar hasta la cima del fuerte (~143 msnm, 470 pies snm) es el premio máximo de esta cacería, pues la vista es más que espectacular!

 

Como llegar hasta el Fuerte Caprón: Llega por la carretera # 333 hasta el lugar del estacionamiento e inicio del camino (N17 57.268 W66 54.267). La pendiente es bastante suave, lo que dificulta el ascenso es el calor y los mosquitos. Ya casi llegando vas a encontrar que ese camino se cruza con otro, debes seguir de frente. La continuación del camino parece el cauce seco de una pequeña quebrada, pero ese es el camino (N17 57.602 W66 54.205); si observas con cuidado te darás cuenta por donde ir avanzando. Este camino te llevará directamente a otro que rodea el Fuerte, te recomiendo tomar a la derecha y llegarás por la miniplaza que mencioné antes. El recorrido hasta el Fuerte Caprón es de 1050 m ó 0.65 millas, el tiempo aproximado es de unos 30 minutos, el descenso se hace en 19 minutos. Por seguridad no dejes objetos de valor visibles en el vehículo.

Otra manera de llegar al Fuerte Caprón es por el camino que sale del Centro de Visitantes del Bosque Seco. Esta ruta es más larga

lunes, 11 de octubre de 2010

Terremoto de 1918

El 11 de octubre de 1918, día de San Fermín. El terremoto comenzó a sentirse en forma repentina a las 10:14A.M. De acuerdo a datos oficiales un total de ciento dieciseis (116) personas perdieron sus vidas y la pérdida de propiedad alcanzó en valor cerca de cuatro millones de dólares, cifra cuantiosa para la época.

 La parte noroeste de la Isla fue la más afectada por el terremoto dada su proximidad al epicentro. Se estima que la magnitud del terremoto alcanzó 7.3 en la escala Richter. La magnitud es una medida de la cantidad aproximada de la energía liberada durante un sismo. Un terremoto 7.3 en la escala Richter se considera un evento de gran magnitud.

La intensidad del evento alcanzó un nivel IX en la ciudad de Aguadilla y sus alrededores acorde a la escala Rossi-Forel utilizada en la época. Tal intensidad supone un efecto entre destructor y devastador. Alcanzó un nivel de intensidad VIII en Mayagüez, Isabela y sus alrededores, lo cual significa efectos del terremoto en el suelo, las estructuras y el comportamiento de las personas y animales en un lugar determinado. Los niveles de intensidad IX y VIII significa que sus efectos fueron severos, capaces de ocasionar grandes daños y pérdidas de vidas como en efecto ocurrió.

El terremoto comenzó con una pronuncidada vibración vertical seguida de oscilaciones del este y oeste. El terremoto comenzó repentinamente, sin aviso. No se habían sentido sacudidas en la parte noroeste de la Isla durante siete u ocho meses. Dos fuertes temblores separados por un intervalo de dos o tres minutos fueron sentidos. el primero fue el más fuerte y fue descrito como el que tuvo un fuerte movimiento vertical; fue seguido de oscilaciones horizontales que causaron gran parte de las pérdidas. Sinttiéronse temblores de menor intensidad a frecuentes intervalos. Subsiguientemente, y al principio, parecía que la tierra temblaba sin cesar en períodos de gran duración. Las fuertes sacudidas subisugientes, el 24 de octubre y el 12 de noviembre, se diferenciaron del primer evento en que parecían consistir principalmente de oscilaciones horizontales. Aún cuando al parecer eran de considerable amplitud, el período de estas oscilaciones horizontales fue relativamente despacio, y por consiguiente, pocos fueron los daños causados, pero algunos objetos sueltos que quedaron en pie con el primer temblor, fueron arrojados al suelo.

 Un gran número de observadores de la región donde la intensidad pasó de VIII informaron haber visto ondulaciones del suelo superficial. En el mayor número de casos estas ondulaciones fueron observadas en los terrenos bajos, llanos y húmedos. Parecían moverse hacia el este o sudeste. La intensidad aparente es siempre mayor en estos terrenos aluviales no consolidados que en puntos correspondientes en roca. Esta diferencia se acentúa donde el agua subterránea está cerca de la superficie. En Puerto Rico, desgraciadamente, la mayor parte de los pueblos y ciudades están construidas, en todo o en parte, sobre tierras aluviales.

 Se formaron grietas de otro tipo en los terrenos bajos y llanos donde el agua subterránea estaba cerca de la superficie. Estas grietas se debieron a la incoherencia del terreno al ser sacudido por el paso de las ondulaciones descritas. Por muchas de estas grietas salió agua mediante la presión de la ondulación al pasar, y esta agua contenía más o menos arena que se quedó depositada en la superficie. Otro de los efectos fue el aumento del volumen de agua en corrientes y zanjas procedente de la extracción de agua de los espacios entre las partículas en aluvión saturado, mediante la compresión y tal vez también de las rocas fracturadas. Este fenómenos es hoy conocido como licuación de arenas.

 Una gran ola marina sísmica siguió al terremoto. Alcanzó su mayor elevación en los puntos cercanos a la esquina noroeste de la Isla, donde se observó casi inmediatamente después del terremoto. La gran ola que acompañó el terremoto se acercó a la playa con el arco delante de la cresta, toda vez que el agua primero se retiró de la costa para después volver. Este hecho concuerda con la hipótesis de que hubo súbito desplazamiento hacia abajo de limitada área del fondo del mar. Una gran ola marina, como la observada, puede ser causada por el súbito desplazamiento vertical del fondo del mar pero no por un desplazamiento horizontal.

En todos los lugares que se vió la ola en las costas de Puerto Rico e islas vecinas, los observadores informan que el mar primero se retiró de la costa exponiendo a la vista, en algunas partes, arrecifes y extensiones del fondo del mar nunca habían sido visibles en las mareas más secas. Y entonces el agua volvió, alcanzando elevaciones igualmente altas sobre lo normal. En algunos puntos la gran ola vino seguida de una o dos más pequeñas. En las bahías cerradas el agua siguió con flujo y reflujo por algún tiempo.

Cerca de Punta Agujerada se calculó la elevación de la ola entre 5.5 y 6.0 metros (apróximadamente 20 pies). Los cálculos del tiempo transcurrido entre el temblor de tierra y la llegada de la ola marina fueron de 4 a 7 minutos.

En el pueblo de Aguadilla 32 personas murieron ahogadas y cerca de 300 ranchos existentes en la playa fueron destruídos. En la vecindad de Punta Agujerada 8 personas murieron ahogadas.

fuente: Red Sísmica de Puerto Rico

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Iglesia Católica San Miguel Arcángel: Cabo Rojo

Iglesia Católica San Miguel Arcángel: La estructura donde ubica la Iglesia San Miguel Arcángel fue designado Monumento Histórico bajo la Ley Núm. 150 del 18 de Junio de 2004. Está ubicada en las calles Barbosa (entrada principal) Riuz Belvis (costado izquierdo) y Luis Muñoz Rivera (parte posterior).  La estructura que acoge a la Iglesia San Miguel Arcángel del Municipio de Cabo Rojo es una de las más hermosas de todo Puerto Rico.  Su historia está ligada a la fundación de Cabo Rojo mediante Orden Real  del rey Carlos III de 17 diciembre de 1771.  Sin embargo, no fue hasta el 29 de septiembre de 1783, que se dedica la parroquia al patrono de San Miguel Arcángel y dos años después que comenzó a construirse el templo. En la iglesia se encuentran las actas de nacimiento de Ramón Emeterio Betances, Salvador Brau y el legendario Pirata Cofresí. Frente a la entrada principal Betances cumplió su apostolado dando libertad a los niños esclavos cuando eran traídos a la pila bautismal. Su precio sin bautizar era de 25 pesos y una vez bautizados costaban 50 pesos. En su Bicentenario se sembró un árbol de Guayacán  al costado de la Plaza de Recreo.

Información Adicional

Sucesos Históricos

1511- Explotación de la Industria de la Sal. Construcción y ataques al Fuerte Reina María ubicado en La Mela.

1512- Según Salvador Brau y Asencio se establece el primer núcleo de personas cerca de los Morrillos.

1525- Las Salinas de Cabo Rojo constituían un renglón de gran importancia en el País.

1559- Los colonos caborrojeños establecen el primer poblado cerca de Puerto Real, en lo que se denominó, Los Altos del Tujao.

1585- Ocupación de Punta Águila.

1759- Se le niega a los caborrojeños la primera solicitud para constituirse en pueblo, debido a una disputa entre dos familias por la ubicación del mismo.

1769- Defensa de las Salinas de Cabo Rojo ante los aguadeños, motivo para el nombre de la Playa del Combate y de "Los Mata con Hacha". En la antigua Ermita, donde está hoy el hogar de ancianos, se defendió la demarcación territorial ante los sangermeños.

1771- El entonces gobernador de Puerto Rico, Don Miguel de Muesas, otorga el permiso para la fundación del pueblo. Gestión realizada por Don Nicolás Ramírez de Arellano, persona que los caborrojeños autorizaron para llevar a cabo los trámites.

1773- Comienza la construcción de la Iglesia San Miguel Arcángel.

1783- Queda bendecida la Iglesia y se escoge al Patrón San Miguel Arcángel en honor al gobernador, Don Miguel de Muesas.


martes, 28 de septiembre de 2010

La Desendencia del Capitán Antonio de los Reyes Correa

                         La Desendencia del Capitán Antonio de los Reyes Correa

por: Carlos Ayes Suárez, Arqueólogo

El Municipio de Arecibo es conocido como la Villa del Capitán Carrea. Dicho cognomento surge como resultado del heróico enfrentamiento de un reducido grupo de hombres, capitaneados par An­tonio de los Reyes Carrea, al desembarco de un nutrido grupo de corsarios británicos en las inmediacianes de la Villa de Arecibo con el propósito de asediar la misma. El tema de la resistencia arecibeña a la acción bélica extranjera ha sido tratado desde el Siglo XVIII por más de un historiador sobre todo por el arecibeño Don Cayetano Coll y Toste, quien analiza el acontecimiento dentro del centexto de la situación de beligerancia que prevalecía en dicho período entre las distintas potencias imperialistas europeas.

El 5 de agosto de 1702, desembarca en el litoral marino arecibeño una tropa de dos buques de guerra británicos. Ante la gran desproporción de los contingentes: et Capitán de las Milicias, Antonio de los Reyes Carrea, junto a 11 milicianos y 19 civiles, se replegó después de la primera escaramuza y recurrió a la táctica de etaque por asalto, cuando las tropas británicas avanzaban por los bosques aledaños a la villa. La resistencia arecibeña Iogró que las tropas británicas se replegaran y, mientras iban de retirada, les causaron considerables bajas.

En la refriega fueron heridos el propio Capitán Correa, el Ayudante Nicolás Serrano, el Sargento Mayor Jose Rodr[guez de Mathos y el soldado Pedro de Alejandría, de quien se da cuenta que muere como resultado de las heridas recibidas. La heróica resistencia llevada a cabo por los milicianos fue recompensada por la corona española. Al Capitán Correa se le concedió una medalla de oro de la Real Efigie por parte del Rey Felipe V; y de igual modo, se la concedió a este y al Ayudante Nicolas Serrano el grado de Capitan de Infantería del Ejército Español. Al Sargento Mayor Jose Rodriguez de Mathos se le concedió el grado de Alferez. A la madre y a los hermanos de Pedro de Alejandría, único caido en combate, se les pensionó. Mientras que a los demás milicianos se les repartio 500 pesos por sus servicios.

El fraile benedictino Iñigo Abbad y Lassierra nos comenta en su obra Historia Geográfica, Civil y Natu­ral de la Isla de San Juan Bautista de Puerto Rico, publicada 86 años después del incidente, que como resultado de los actos heróicos del Capitán Correa, su familia seguía siendo distinguida. Al momento del asedio, el Capitán Correa era Teniente a Guerra del Partldo de Arecibo. Cargo que ocupo por muchos años, hasta que declinó a favor de su ahijado y nieto Jose Correa y Rodríguez de Mathos. Muere el 9 de junio de 1758.

El Capitán Carrea era hijo de Joseph Rodríguez Correa y Francisca Rodríguez de Valdéz Colón. Descendía por línea materna del Gobernador Diego Menéndez de Valdés, quien ejerció su cargo del 12 de junio de 1582 al 11 de mayo de 1593. Contrajo matrimonio can Estefania Colón de Luyando, de quien enviudó el 2 de agosto de 1715. Su cónyuge era hija de Nicolás Rodríguez y María Colón de Luyando. La familia Colón de Luyando era descendiente de Diego Ramos Colón, Teniente y Sargento Mayor del Partido de Coamo, quien a su vez descendía de conquistadores y estaban emparentados de igual modo con los Menéndez de Valdés.

El matrimonio Carrea-Colón procrea 12 hijos. A saber: Francisco, Joseph, Ana, Nicolás, Cayetano, Francisca de los Reyes. Antonio, María del Rosario, Pepa María, Felipe, María Magdalena y María de las Nieves. Su hijo Francisco Correa Colón muere en San Juan el 16 de enero de 1774, contrajo matrimonio con María Manuela Rodríguez de Mathos, el 26 de agosto de 1717 en la Catedral de San Felipe Apóstol de Arecibo. La misma era hija del Alferez Joseph Rodríguez de Mathos, quien se había destacado en la defensa de la villa durante los incidentes del 5 de agosto de 1702, y de Antonia de Jesús. Parece ser que el ahijado y nieto, José Correa Rodríguez de Mathos, a favor del cual el Capitán Correa declina en su puesto de Teniente á Guerra, era hijo de este matrimonio.

Su hijo (de José Correa), Antonio Correa de Mathos, bautizado el 14 de agosto de 1729 en la Catedral de San Felipe Apóstol de Arecibo, contrajo matrimonio con Francisca Olaya Otera. Esta era hija del Alferez Pedro de Otero Pardo, quien para el 17 de iulio de 1700 formaba parte de la Compañía de Milicias de la Villa. No sabemos si éste se encontraba entre los 11 milicianos a los que se hace referencia, pero nos llama la atención el hecho de que no empece a que dos años antes del incidente se reporta la existencia de dos compañía de milicianos con un total de 138 hombres, solo estuvieran disponibles at momento 11 de ellos.

Antonio Cortes de Mathos se establece en el Partido de Vega Baja, junto a su cónyuge Gregoria Ortíz Montalvo, con la cual contrae matrimonio el 20 de Julio de 1756, en la Catedral de San Felipe Apóstol de Arecibo. En 1805, su hijo Juan Carrea Ortíz ocupa el puesto de Teniente a Guerra del Partido de Vega Baja. El 7 de febrero de 1807 muere Antonio Carrea de Mathos en dicho pueblo. Tanto su hijo Juan como su hija Francisca contraen matrimonio con vastagos de la familia Navedo Caraballo. De hecho, Teresa Carrea Navedo, hija de Juan Carrea Ortiz, contrae matrimonio con Juan León Santana Navedo, el 25 de abril de 1815, en Vega Baja.Este ocupo el puesto de Alcalde Constitucional de Vega Baja de 1823 a 1824. Maria del Rosario Navedo Coffee, hija de Francisco Carrea Ortiz y de Joseph Lorenzo Navedo Caraballo, contrae matrimonio con Antonio M. Dávila Banilia, quien también ocupo el puestó de Alcalde Constitucional y de Alcalde Ordinario de Vega Baja en distintos términos.

Los descendientes del Capitán Antonio de los Reyes Correa. que se establecen en el Parddo de Vega Baja, seguirían siendo considerados como parte de las familias distinguidas del pueblo. Los mismos entroncan con las familias Gorbea, Pagola, Juliá, Dávila, Córdova, Balseiro y Goitía, entre otras. Resulta notable la devoción a los Tres Santos Reyes entre la familia Correa-Colon. De ahí que el segundo nombre del Capitan Correa fuera de los Reyes. Para el mismo período vamos a encontrar a la familia de Pedro José y Lucia de los Reyes, donde se observaría et mismo culto devocional a los Tres Santos Reyes por varlas generaciones.

fuente: http://blogsdecuba.impela.net/2010/07/datos-historicos-de-puerto-rico-17/